La Sede Central Salesiana se instala de forma definitiva en la casa del Sacro Cuore en Roma

En un mensaje compartido el 17 de diciembre, coincidiendo con el inicio de la Novena de la Fiesta de Navidad, el Rector Mayor informaba a los Salesianos y miembros de la Familia Salesiana acerca de la decisión tomada junto con el Consejo General con respecto a la ubicación definitiva de la «Sede Central Salesiana».

«Les comunico la decisión definitiva de instalar la Sede Central Salesiana en la casa del Sacro Cuore de Via Marsala 42, Roma», de esta forma compartía don Ángel Fernández Artime una noticia fruto de un «largo y minucioso proceso de discernimiento en el que se han evaluado múltiples soluciones».

En su mensaje, en el que hace un recorrido tras la elección definitiva de dejar la antigua sede en Via della Pisana 1111 hasta llegar a la decisión final, agradece la acogida de los hermanos de la comunidad de la casa inspectorial de Italia Central (ICC), la comunidad del Sacro Cuore y de la Comunidad del Centro Nacional de Italia por su disponibilidad desde la llegada en el verano de 2017.

«Junto con el Consejo General nos hemos comprometido a ayudar a la Inspectoría ICC y a la comunidad de San Lorenzo de Roma, del Centro Nacional CISI, para encontrar una colocación idónea de sus respectivas sedes», añadía estimando que este proceso de traslado y adecuación finalizará, como máximo, antes del verano de 2020.

Entre las funciones de la futura comunidad de la Sede Central Salesiana estarán la animación de la Basílica y de la parroquia del Sagrado Corazón, el servicio a los jóvenes inmigrantes y la animación de «le Camarette di Don Bosco» como parte de los lugares salesianos.

El mensaje concluía enumerando las amplias muestras recibidas en los últimos meses que respaldaban esta decisión dada la significatividad de este lugar en relación a Don Bosco.

Don Bosco y el Sacro Cuore

El «Sagrado Corazón de Jesús» ocupa un lugar especial en la historia salesiana al tratarse del emplazamiento donde Don Bosco celebró una de sus últimas misas y lloró durante ella recordando toda su vida.

El 5 de abril de 1880, León XIII invita a Don Bosco asumir la responsabilidad de construir la Iglesia en honor al «Sagrado Corazón de Jesús», especificando no tener fondos para ofrecerle.

«Don Bosco pide al Papa la posibilidad de construir un internado, y fundar una escuela de artes y oficios para los jóvenes pobres que abundan en el barrio» (GB Lemoyne). La edificación cuesta al anciano Don Bosco enormes fatigas y el 14 de mayo de 1887 es consagrada. El Santo celebra su última misa el 16 de mayo de 1887 donde «llora muchas veces, contemplando su vida».

En 1921 el Papa Benedicto XV declaró el templo del «Sagrado Corazón de Jesús» como Basílica Menor.

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