El inicio de la misión salesiana en Paraguay

 

salesianos.org.py – El salesianos.org.py – El 23 de julio celebramos un nuevo aniversario del inicio de la Obra de Don Bosco en Paraguay, que comenzó en 1896 con la llegada de los primeros salesianos al país. Sin embargo, esta historia de fe, educación y compromiso social había empezado mucho antes.

Ya en 1879, el P. Juan Allavena fue el primer salesiano en pisar suelo paraguayo, aunque solo permaneció unas semanas. Ese mismo año, Don Bosco había dispuesto el envío de tres salesianos al país, pero por diversos motivos, dicha misión no pudo concretarse.

Tuvieron que pasar 13 años hasta que se retomara el contacto directo con Paraguay. En 1892, el P. Ángel Savio visitó Asunción y algunos pueblos del interior, donde convivían numerosos inmigrantes italianos.

Monseñor Lasagna y el impulso definitivo

El verdadero impulso para el establecimiento de los salesianos llegó en mayo de 1894, con la visita de Monseñor Luis Lasagna, enviado especial desde Uruguay. Desembarcó a orillas del río Paraguay en la noche del 16 de mayo, y al día siguiente arribó al puerto de Asunción.

Durante su estadía, visitó al entonces presidente Juan Gualberto González, con quien sentó las bases para la llegada de los salesianos: la creación de una escuela de artes y oficios, la atención a las misiones indígenas y el fortalecimiento de la Iglesia local.

En junio de ese mismo año, Mons. Lasagna continuó viaje hacia el norte del país. Entre el 20 y 22 de julio visitó Villa Concepción, donde confirmó a más de 300 personas, dialogó con las autoridades locales y estudió la posibilidad de fundar un colegio.

El 3 de febrero de 1895, tuvo un rol clave en la consagración de Mons. Juan Sinforiano Bogarín como obispo del Paraguay, en una ceremonia que contó con la presencia del presidente General Egusquiza. Fruto de esa visita, el gobierno presentó al Senado un proyecto para ceder a los salesianos el antiguo hospital y varios terrenos contiguos, con el fin de establecer una escuela de artes y oficios.

La llegada definitiva

Finalmente, el 23 de julio de 1896, desembarcaron en Asunción los primeros misioneros salesianos que darían inicio formal a la Obra de Don Bosco en Paraguay. Ellos fueron: P. José Gamba, inspector de las casas salesianas en Uruguay y Paraguay; P. Ambrosio Turricia, designado director; P. Domingo Queirolo; Pedro Foglia, acólito; y Carlos Dugnani, coadjutor.

Un año después, en 1897, Don Miguel Rúa expresó:

«A costa de grandes sacrificios hemos querido cumplir, al menos en parte, los ardientes votos de Monseñor Luis Lasagna, enviando algunos salesianos a Asunción, capital del Paraguay».

Aunque el gran impulsor, Monseñor Lasagna, no pudo acompañar aquella primera expedición —pues falleció trágicamente en Juiz de Fora (Brasil) el 6 de noviembre de 1895—, su visión y empeño hicieron posible que la semilla salesiana echara raíces profundas en tierra paraguaya.

Hoy, más de un siglo después, esa semilla sigue dando abundantes frutos en favor de la juventud y del pueblo paraguayo.